Los propietarios de viviendas turísticas buscan la “supervivencia” en el alquiler de temporada
La Federación Española de Asociaciones de Viviendas y Apartamentos Turísticos (Fevitur) estima que este negocio perderá 2.900 millones hasta finales de 2020 por la crisis sanitaria y económica provocada por el covid-19. Algunos propietarios de estas viviendas han aterrizado en el alquiler temporal a modo de “supervivencia” para cubrir los costes de las hipotecas y de los gastos derivados del piso. Ofrecen contratos de seis meses a un año totalmente legales, en muy buenas localizaciones y con precios muy competitivos para seducir a trabajadores extranjeros desplazados a España o a estudiantes – el perfil de este tipo de clientes-. Un cambio de modelo, de objetivos y de plataformas donde anunciarse para sobrevivir al parón turístico.
Para España, el turismo es un sector fundamental. Según los datos del INE, en 2019 visitaron España 83,7 millones de turistas extranjeros que dejaron un gasto de 92.278 millones de euros. Esta cifra supone un 12,5% del PIB nacional, un porcentaje que pone de manifiesto la importancia de este negocio. Es el gran motor de la economía española, pero la crisis derivada del coronavirus ha terminado por gripar su salud. Dentro de este segmento concurren varios negocios: el transporte aéreo, la hostelería, la restauración o los alojamientos turísticos.